Relaciones con EE.UU. y comercio bilateral

Estados Unidos es uno de los principales socios comerciales de España fuera de la Unión Europea y un destino clave tanto para sus exportaciones como para la inversión extranjera directa. Las relaciones bilaterales de España con los Estados Unidos comienzan en el mismo instante de su fundación, a finales del siglo XVIII, con el apoyo español en la Guerra de Independencia, que se materializó en Bernardo de Gálvez, gobernador de Luisiana (Ministerio de Exteriores, s.f.).

Comercio bilateral

Productos

Según los datos provisionales del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa (2024), obtenidos a través de la base de datos DataComex, EE.UU. importó de España en 2024 productos por un valor de 16.607.528.774 euros. Esta cantidad es menor comparada con las exportaciones de 2023, aunque la tendencia ha sido positiva durante las últimas décadas.

Además, los 5 productos más importados por TARIC en 2024 según los datos provisionales del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa (2024) son los siguientes:

13,81%

Máquinas y aparatos mecánicos

8,26%

Aparatos y material eléctrico

6,86%

Grasas, aceite animal o vegetal

6,71%

Combustibles, aceites minerales

6,02%

Productos farmacéuticos

Servicios

En cuanto a los servicios, el Bureau of Economic Analysis (2024) ofrece datos sobre las importaciones en EE.UU. de servicios provenientes de España hasta 2023. La siguiente tabla muestra la evolución histórica positiva de las importaciones de servicios en EE.UU.:

Asimismo, los 5 servicios más importados en 2023 por categoría fueron los siguientes (Bureau of Economic Analysis, 2024):

46,03%

Viajes (a todos los efectos, incluida la educación)

15,2%

Transporte

11,65%

Otros servicios empresariales

6,08%

Servicios financieros

5,61%

Telecomunicaciones, informática y servicios de información

Inversión Extranjera Directa (IED)

En lo que respecta a la Inversión Extranjera Directa, según datos compartidos por el Bureau of Economic Analysis (2024) sobre la posición de la inversión extranjera directa en Estados Unidos en base al coste histórico, se puede observar que durante la última década el crecimiento ha sido positivo, aunque el Covid-19 frenó las actividades de inversión extranjera y durante los últimos años se ha ido recuperando la actividad:

Según otros datos publicados por el Ministerio de Economía, Comercio y Empresa (2024) en la base de datos Globalinvex sobre los flujos de inversión extranjera directa no ETVE, Estados Unidos es el país en el extranjero en el que se invirtió más en 2024:

La inversión se desglosó de la siguiente manera, según el tipo de de operaciones, comunidad autónomas e industrias:

Según el tipo de operaciones

Greenfield

Adquisiciones

Brownfield

Otras ampliaciones

Según el tipo de comunidad autónomas

2405.08 M€

Comunidad de Madrid

1081 M€

Principado de Asturias

959 M€

País Vasco

151 M€

Castilla y León

112.88 M€

Resto

Según el tipo de industria

5,710.83 M€

Suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado

1,383.13 M€

Fabricación de vehículos de motor, remolques y semirremolques

184.73 M€

Servicios de alojamiento

137.88 M€

Transporte terrestre y por tubería

50.95 M€

Actividades inmobiliarias

31.66 M€

Actividades administrativas de oficina y otras auxiliares a empresas

Perspectiva a futuro

Para aquellas empresas que exportan un elevado volumen a los EE.UU., expandir operaciones en los EE.UU. con una entidad local es un movimiento estratégico para garantizar el crecimiento a largo plazo. De esta manera, se pueden evitar problemas relacionados con los aranceles (por ejemplo, añadiendo valor al producto de forma local en EE.UU.) y reducir la incertidumbre en torno a los problemas de las cadenas de suministro. La inquietud en torno al futuro de los aranceles comerciales de EE.UU. y las políticas American First podrían llevar a que más empresas de España opten por establecer operaciones en EE.UU. y desarrollar su capacidad en el país para mantener su competitividad en el mercado y eludir los aranceles sobre los productos manufacturados exportados directamente desde la UE, así como para crear una opción de respaldo que permita actuar con mayor rapidez y flexibilidad.

Es importante recordar que uno de los principales hitos del primer mandato de Trump fue la Ley de Empleos y Reducción de Impuestos (TCJA, por sus siglas en inglés) de 2017, que redujo el impuesto de sociedades del 35% al 21% y modificó significativamente la forma en que las multinacionales extranjeras invierten en Estados Unidos. Aunque la reducción del impuesto federal de sociedades del 35% al 21% en 2017 iba a expirar pronto, con un presidente, un senado y una cámara republicanos, es muy probable que esa reducción se mantenga, y la intención de Trump es recortar aún más el tipo del impuesto de sociedades estadounidense del 21% al 15%. En consecuencia, puede ser favorable aumentar la inversión y operaciones en EE.UU. y dejar los beneficios en la entidad estadounidense. El tratado bilateral con España permite que los accionistas pueden seguir trasladando esos beneficios a la matriz con un tratamiento favorable.

Posible reducción del Impuesto de Sociedades estadounidense

En resumen, a pesar de la incertidumbre en torno a los aranceles que puedan imponerse por industria o por origen, se espera que siga aumentando la inversión española en el país y el volumen de exportaciones.

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